Psicólogos consultados en distintos medios alertan de los efectos devastadores de este single fruto del despecho en los hijos de la otrora pareja, Milan y Sasha, por mucho de que se trate de un hito en la historia de la música y encumbre a la cantante, que ha actuado desde las vísceras, con clara sed de venganza, tras cerrar el acuerdo de separación en el que se queda con la custodia de los niños.